La conducción distraída es uno de los hábitos más peligrosos que las personas han desarrollado en la última década, lo que lleva a miles de lesiones y muertes cada año en los Estados Unidos. Uno de los peores aspectos de esto es lo común que se ha vuelto.
A pesar de las leyes contra el uso de teléfonos celulares aquí en Massachusetts, nuestros conductores todavía practican este comportamiento peligroso. Esto se debe a que no solo se necesitan leyes para prevenir colisiones graves, sino también conductores que necesitan ser educados o incluso reeducados para desalentar la conducción distraída.
La importancia de la educación sobre la conducción distraída
La mayoría de las personas en Massachusetts aprenden a conducir a través de una combinación de lecciones privadas con sus padres y en escuelas secundarias públicas. Los maestros de escuelas públicas pueden ser certificados por el Registro de Vehículos Motorizados de Massachusetts (RMV) para enseñar clases de conducción generales. También hay programas privados de educación para conductores que permiten a los conductores adolescentes obtener experiencia práctica con un instructor sin tener que pasar por sus escuelas.
En los últimos años, estos programas han comenzado a enseñar a los conductores jóvenes sobre los peligros de la conducción distraída, pero pueden detenerse en explicar que es ilegal y por qué los conductores deben evitarlo. Sin embargo, la educación puede necesitar ir mucho más allá para asegurar que los conductores adolescentes nunca desarrollen estos hábitos peligrosos. La mayoría de los conductores saben que conducir a exceso de velocidad o bajo la influencia del alcohol es ilegal, pero la conducción distraída es un comportamiento aprendido que la mayoría de los conductores ni siquiera son conscientes de que están haciendo.
La educación sobre la conducción distraída también es importante para los conductores mayores que no han visto el interior de un aula en años. La mayoría de los conductores mayores confían en sus años de hábitos de conducción y su instinto para mantenerse seguros en la carretera. Muchos se engañan pensando que tienen suficiente experiencia para hacer varias cosas a la vez, pero esto es un mito peligroso. Nunca se debe subestimar un poco de educación adicional. Los conductores de cualquier edad pueden aprender nuevas técnicas para mantenerse más seguros y comprender las duras consecuencias de un accidente de conducción distraída.
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¿Cómo puedo aprender más sobre la conducción distraída?
El RMV de Massachusetts se ha asociado con el Consejo Nacional de Seguridad (NSC) para patrocinar clases de conducción distraída y otros programas especializados de educación para conductores. Estas clases se centran en enseñar a los conductores sobre los diferentes tipos de conducción distraída y cómo evitarlos. La conducción distraída puede incluir más que simplemente enviar mensajes de texto o hacer una llamada telefónica; puede ser comer, arreglarse, soñar despierto y discutir con los pasajeros. A través de estos programas, los conductores pueden aprender a identificar y prevenir hábitos peligrosos.
Si un conductor viola la prohibición estatal de teléfonos celulares dos veces o más, el RMV puede exigirle que tome un curso en línea de conducción distraída a través del NSC, pero también es beneficioso para los conductores que no han violado la ley. El curso solo cuesta $25 y guía a los usuarios a través de los peligros de la conducción distraída, los diferentes tipos de distracciones y soluciones para detener este comportamiento.
Los conductores también deben estar atentos a los programas de conducción defensiva cerca de ellos, ya que a menudo incluyen lecciones sobre la conducción distraída. Muchas compañías de seguros ofrecen descuentos en las primas cuando un conductor completa uno de estos programas, la mayoría de los cuales se aplican a conductores adolescentes.
Los simuladores de conducción distraída son otra forma de aprender de primera mano el impacto de la conducción distraída. Mientras que algunos están disponibles en línea, otros recorren el país y pueden ser solicitados para escuelas locales. Si eres un padre preocupado por los hábitos de conducción de tu adolescente, este simulador puede ser una forma efectiva de educarlos.
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